Anécdotas
Hípicas Venezolanas presenta | |
Gangas
Equinas | |
Editado
por Juan Macedo | |
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El mercado de caballos, como la
historia ya vieja del muchacho pobre que se hace millonario y las múltiples faces de las
Cenicientas deportivas, tiene casos dignos de ser
repetidos. |
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La ganga más
grande que se ha presentado en este mercado es el de Stymie. La señora Ethel D. Jacobs lo tomó por US$1.500 en una carrera de reclamo.
Cuando lo retiró de la pista, era líder mundial del dinero con ganancias
de US$918.485.
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Un hombre tan
conocedor del caballo, como su preparador Hirsch Jacobs, no adivinó que lo que estaba adquiriendo
al comprar a Stymie, era una estrella
“Yo pensé que por US$1.500 era una
buena compra. No creí que sería mejor”. | |
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Hubo un caballo famoso: Top Row. Peanuts, su padre,
fue pequeño y no logró
simpatías. Pero por gran
corredor logró romper la barrera de reservas que se tenían en su
contra. | |
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Peanuts fue enviado a
subastas y por su poca
alzada lo compraron por
US$2.100. Con el tiempo
ganó para su propietario US$95.000. Además produjo a Top Row, superior a su padre como corredor.
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Top Row fue reclamado
por US$3.500 en Narragansett Park. En 1936 ganó la Santa Anita
Handicap de US $100.000. Posteriormente marcó
record mundial para la distancia de 1700 metros.
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Roman Soldier fue rechazado
en el haras. No lo enviaron a ventas. Posteriormente fue
vendido en el mismo haras por US$1.000. Max Hirsch lo tuvo a los dos años y gano cuatro carreras. Decidió
venderlo y para hacer más
atractiva su oferta, lo inscribió en el Kentucky Derby. Era una manera de
engañar a los incautos. Sin
embargo logró
apenas US$7.500 por él.
Se sintió satisfecho. Román
Soldier ganó después el Detroit Derby, el
Texas Derby y US$91.935 a
los 3 años. | |
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En Faraway Farm, en el pasto azul de Lexington,
hay una enorme estatua de bronce de Man O'War. Poco más allá está la tumba sencilla de su
padre Fair Play. Más lejos aún, en un sitio olvidado casi, está la
tumba de Hastings, abuelo de Man O'War. | |
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La historia de
Hastings es fantástica. Es el
muchacho harapiento que alcanza la corona real. Ciertamente fue
un caballo feo,
contrahecho, patas torcidas y
nada elegante. | |
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En 1894 las
cuadras de David Gideon y
John Daly
tenían veinte bellos potrillos, 16 de los cuales eran perfectos.
Los cuatro restantes fueron segregados. En 1895 se comenzó la preparación.
Entre los cuatro
desechados había uno horrible como no se había visto nunca. Para
colmo era una fiera. Esto último lo salvó. El asistente preparador se
propuso mantenerlo hasta tanto
lo amansara por lo menos. | |
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Simón Healy, el asistente
preparador, sabía de orígenes y
pensó que un hijo
de Spendthrift en Cinderella, como era Hastings, no podía despreciarse
sin una prueba previa. Cuando llegaron los compradores, Healy escondió al feo potrillo. Él contó una vez: “Me regañaron por esconderlo y me ordenaron venderlo por
lo que ofrecieran. Llamé
a un amigo mío para que lo comprara bajo mi responsabilidad. Me llamó loco y se fue diciéndome que era
mejor comprar una loza de cementerio”. | |
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Cuando el dueño
volvió a la cuadra y vio al potrillo, maldijo a
Healy diciéndole: “Si vuelvo a encontrar a este animal en
mi caballeriza, lo despido a usted”. | |
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Healy
llamó a un
traqueador y preparó al animal,
ocultándolo bien. Pasó por muchos sustos mientras lo entrenaba. Su apariencia
mejoró. | |
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Un día lo
descubrieron con el potro. Todos los insultos llovieron sobre Healy. Pero la historia termina sencillamente. Todos
los 20 apolos equinos de la caballeriza fueron perdiendo, uno a uno, con Hastings. Hasta Requital, ganador del Futurity de 1895, se desinfló contra Hastings. | |
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Cuando Henry Griffin fue contratado como jinete de
la cuadra, nada sabía de sus caballos
y por lo tanto no tenía prejuicios. Se montó en Hastings y quedó sorprendido. Fue con
la noticia donde el
propietario. Este respondió con expresiones propias de quien odiaba irreductiblemente al feo animal. Sucedieron cosas
inenarrables pero un día el preparador jefe de
las caballerizas, John Hyland, pidió para el potro a sus mejores peones. Para
entonces, Hastings aun no tenía nombre. Este se
ganaba con los méritos en la
pista. Los animales corrían como hijos de fulano en sutana. | |
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El
futuro Hastings debutó en 1200
metros y ganó fácilmente.
Los propietarios comenzaron a pensar seriamente en el nombre que iban a darle.
Pensaron en el Marqués de
Hastings, el mayor derrochador del mundo en materia de
purasangres. Como el
potro era hijo de
Spendthrift, lo pusieron Hastings. | |
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Cuando los
precios de los caballos subieron, los dueños vendieron a su caballeriza, Hastings entre las existencias. Ya tenía tres carreras ganadas. | |
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Cuando el martillo iba y venía, el mayor Augusto Belmont pagó US$37.000
por él. Nunca hizo quedar
mal a su comprador. Se
portó como el mejor caballo de su tiempo. Retirado a lo reproducción, dio a Fair Play, que produjo a Man O'War. | |
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¿Se dan cuenta de lo que vale ahora la terquedad de aquel muchacho
preparador asistente? De no haber salvado a Hastings, a buen seguro que no
habría nacido Man O'War.
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The
Widow, ganadora del
Cambridgeshire de 1847.
Quedó huérfana recién nacida y la criaron con tetero. El criador se la regaló a un alguacil. Pero como éste
no tenía interés en un caballo de carreras,
vendió la potra a un señor Pinner por diez libras esterlinas.
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The Widow fue metida
entre las vacas donde se
crió. Cuando creció, comenzaron a domarla. Sorprendió por su velocidad
mayor que la de cualquier animal conocido por su propietario. Este la
envió a las pistas y así The Widow
apareció inscrita y ganadora del
Cambridgeshire. | |
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Haciendo una apuesto de 10.000 libras
esterlinos a que su yegua
ganaba, este propietario se hizo rico. Todo el mundo se burló de su osadía y le tomaron la apuesta. Él fue quien rió de último.
The Widow ganó y de la noche a la mañana
se hizo rico. | |
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Fuentes: extraído de la Revista
Turf. | |
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Anécdotas
Hípicas Venezolanas, jueves 29 de
junio de 2017 | |
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