Anécdotas
Hípicas Venezolanas presenta | |
Carreras
de caballo en Maracaibo | |
Por
José Joaquín Lizardo | |
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Las
carreras han sido en todos los tiempos el plato favorito de la mayoría de
los habitantes de Maracaibo y sus alrededores. Es
innegable que la pasión por las carreras, especialmente las de caballos ha
sido para una mayoría de zulianos el atractivo más emocionante y
arraigado que bien puede decirse ha sido como algo hereditario transmitido
desde antaño como una dinastía
interminable | |
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Para
llegar a la conclusión de lo que apuntamos vamos a citar lo que
textualmente nos han contado nuestros abuelos, nuestros padres y muchos
otros personales que conocimos cuando apenas teníamos unos pocos años,
pero que se nos quedaron impresas y hoy después de muchísimos años las
recordamos fresquecitas como si las estuviéramos oyendo todos los
días. |
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Nos
contaron nuestros padres, abuelos y ancianos de reconocida honradez estos
en su mayoría ya difuntos que en Maracaibo y en casi todos los caseríos
vecinos se celebraban continuamente emocionantes carreras de caballos, de burros y mulos en las cuales se cruzaban
grandes apuestas entre los propietarios de cada animal que competía y
entre los dos bandos de partidarios que según versión de nuestros viejos
era numerosísima. Nos cuentan que para celebrar estas competencias
escogían con preferencia los siguientes sitios, Calle La Marina desde el
antiguo Puente España, Calle Ancha, Arismendi o Salina Ancha, Los Haticos,
La Ranchería, Bella Vista y otros muchos sitios los cuales estaban sin
pavimento y se prestaban para efectuar con facilidad las competencias
hípicas. | |
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Así
pues, nos contaban emocionados nuestros buenos viejos que para presenciar
las competencias apuntadas era un contento ver a la gran concurrencia que se daba
cita en cualquier lugar que se efectuaba sin importarles en nada la
distancia y lo importante era poder presenciar la carrera y apostar unas
morocotas o unos cuantos fuertes al ejemplar de su
predilección | |
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En
Maracaibo hemos tenido tres
hipódromos de los cuales según nos cuentas el primero estuvo ubicado por
los lados de la vieja Caribbean parece que solo
tenía unos 500 u 800 metros. El segundo estaba enclavado en terrenos del
antiquísimo Hato Santa María. Este parque tenía en sus primeros tiempos
una pista de una milla la que fue reducida a solo 100 metros en tiempos de
la administración del General Pérez Soto. | |
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Este
mandatario ha sido uno de los gobernantes en el Zulia que más se ha
preocupado por el resurgimiento de
la hípica hasta el punto de que en esas temporadas puede decirse con
toda verdad que realmente fueron verdaderas tardes inolvidables en la
mente de muchísimos parroquianos que a pesar del tiempo transcurrido
todavía se comentan como si las estuviéramos
viendo. | |
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Una
prueba evidente de que los zulianos han sido siempre verdaderos amantes de
las carreras de caballos la tenemos según nos cuentan verídicamente del
gran número de personas que se dedicaban a la preparación de los animales
de carrera y esto era de sucesión en sucesión hasta nuestros tiempos como
realmente lo estamos comprobando en el tiempo
presente. | |
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Entre
los más destacados de esta dinastía de cuidadores como entonces se
denominaban los que se dedicaban a la preparación de los animales de
carreras se nombraban las personas que a continuación apuntamos. Los
señores Acosta Ríos, Fuenmayor, Galbán y García,
en Maracaibo y Los Haticos, La Pomona, Sabaneta Larga y Cañada Honda eran
nombrados con preferencia las siguientes personas. Villalobos, Hernández,
Bernar, Rubio, Andrade, Portillo, París,
Gallardo, Vílchez y otros muchos que serían interminables de
apuntar. | |
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Todos
estos personajes tenían a su cargo el cuido y preparación de un gran
número de animales de carreras de todos los tipos, es decir de las tres
especies (caballos, mulos y
burros). Nos cuentas que las competencias solo se celebraban entre dos
animales entre los cuales se cruzaban grandes apuestas con una primicia
de lo que llamaban traba que muchas veces oscilaba entre los Bs. 5.000 y
10.000 cuyas distancias preferidas para los mulos y burros eran de largos
metrajes y para los caballos en distancia corta.
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Estos
apuntes copiados textualmente de personas que nos merecen toda confianza
dicen muy claro que no es cierto lo que personas enemigas de las carreras
han dicho que Maracaibo no es plaza para carreras de caballos alegando que
la mayoría de los parroquianos zulianos no gustan del deporte rey y que
por consiguiente siempre están destinadas al fracaso por falta de
público. | |
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Para
concluir con estos cortos recuentos acerca de las antiquísimas temporadas
de carreras celebradas por nuestros antepasados vamos a hacer un ligero
bosquejo de uno de esos acontecimientos celebrados entre dos animales y el
cual no es tan viejo como para que no lo recuerden un gran número de los
que la presenciaron. | |
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En
evento hípico a que hacemos referencia fue celebrado en el Hipódromo Santa María entre una
mula propiedad de un señor de apellido Aguado y un mulo que presentaron
los hermanos Bernal, siendo jinete del mulo uno de
ellos. | |
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Esta
competencia fue solamente lo que llamaban caminata en una distancia de 10
o 15 vueltas al ovalo del Santa María y constituyo toda una novedad puesto
que atrajo más de 30 mil personas que vinieron de todas partes para
presenciar el candeloso match. Esta competencia
fue ganada ampliamente por el mulo y se apostaron más de Bs. 50.000 a cada
animal. | |
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Fuentes:
Extraído de la revista Hípica Zuliana 1961 | |
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Anécdotas
Hípicas Venezolanas,
domingo
31 de julio de 2022 | |
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