Anécdotas Hípicas Venezolanas presenta

Vivo

(Uru, 1964, Choir Boy en Zoteca por Titian)

Por Juan Macedo

“La esperanza es lo último que se pierde, si uno no tiene sueños, no tiene esperanza y si no tenemos esperanza no tenemos sueños”. Una frase que refleja el sentimiento de cualquier propietario que invertía en un purasangre extranjero para buscar la posibilidad de participar en el Clásico Simón Bolívar para llevarse el jugoso premio y el tan deseado trofeo. Sentimiento que posiblemente estuvo presente en la humanidad del General Marco Aurelio Moros cuando adquirió a Toksen Hon por Bs. 45.000 un tresañero uruguayo llamado Zonzo, ganador de 3 carreras (además de 2 segundos y 2 terceros) en ocho salidas en su país de origen, para continuar campaña en el Hipódromo La Rinconada con el nombre de Vivo.

El zaino hijo de Choir Boy nació en el Haras Nacional en el segundo semestre del año 1964 y que en el óvalo de Coche lució la chaquetilla negra con cruz naranja del Stud El Tordillo, siendo alojado en la cuadra de “Pastelito” Armando Fernández Alfaro para su cuido y entrenamiento.

Ya siendo cuatroañero, Vivo realizó su primera actuación en el Hipódromo La Rinconada el 21 de julio de 1968 en recorrido de 1200 metros con la monta de Hernán Rengifo figurando séptimo a 4 cuerpos de Alpechín. Dos semanas después corrió en 1700 metros donde quedó sexto a 10 cuerpos de Veguero. Todo cambió el 18 de agosto cuando se hizo caballero en su cabalgadura Adone Bellardi, mejorando una enormidad para cruzar el disco en ganancia con ventaja de 4 ½ cuerpos sobre Negrucillo y dejando crono de 71”4 para los seis furlones.

Dos semanas después accionó en los primeros metros con mucha facilidad, llamado a correr frente a los 500 metros, pasó al tercero, poco antes de la entrada de la recta final ya se había posesionado de la punta y en los últimos metros no confrontó ningún problema para ganar con ventaja de 5 cuerpos sobre Níspero II, registrando 84”1 para los 1400 metros.

Luego de tres buenas figuraciones donde le faltó suerte para alcanzar la victoria, se reivindicó con la afición el 29 de septiembre con la conducción de Adone Bellardi cuando pasó de un viaje a la altura de los 400 metros para finalmente no confrontar ningún problema para imponerse con ventaja de 4 ½ cuerpos sobre Río Bolsón, agenciando 104”4 para los 1700 metros. Corrió seguido y le ganó en la raya a Short Drink que prácticamente lucía ganador cuando corrían a la altura de los 200 metros finales, Vivo venía bastante abierto, pero quedó ganando por cabeza sobre la meta, parando los cronómetros en 83”4 para los 1400 metros. A la semana siguiente en 2000 metros, sin descanso, corrió a las perdidas y figuró cuarto a 11 cuerpos de Eneas II.

El 27 de octubre se escenificó el Clásico Simón Bolívar con la presencia de notables corredores como Four Clubs, Carpintero, la yegua Una Leona y (porque no) los criollos Canelo y Farolón; además de completar la nómina de 18 inscritos un grupo importante de purasangres en ascenso que podían dar la campanada.

La carrera se hizo bastante movida en los primeros metros cuando el inglés Drake’s Shanty forzó el tren de carrera pasando los primeros 400 metros en 22”2 perjudicando el accionar de otros velocistas como el favorito Four Clubs, mientras que eso lo capitalizaba Una Leona que en el poste de los 800 metros pasaba a dominar en compañía del irreverente Embusteroso, pero no contó con el sostenido avance del uruguayo Vivo con Adone Bellardi a partir de los 500 metros finales, rebasando a la valiente yegua argentina en los metros decisivos y ganar sorpresivamente el magno evento del hipismo venezolano, dejando a Una Leona en el segundo lugar a 1 ½ cuerpos, terminando el recorrido de dos kilómetros en tiempo de 124” exactos.

Anecdóticamente Virgilio Decán “Aly Khan” en su narración cuando dice el criollo Vivo, fue un lapsus, quería decir el criollo Canelo. Se creyó que Vivo correría en el Washington DC International, pero su propietario declaró que no era segura su participación en la dura competencia de Laurel Park, basado en las duras condiciones climatológicas.

Dos semanas después Vivo demostró que su triunfo en el magno evento no fue obra de la casualidad, ya que volvió a ganar demostrando que era un gran corredor, ya que quedó último los primeros metros y al final rebasó accionando con mucho poder para cruzar el disco en ganancia con ventaja de 3 ¾ cuerpos sobre el inglés Rapid Fire, parando el teletimer en 83”4 para los siete furlones. Siete días después apenas logró figurar tercero a 10 cuerpos de Short Drink.

El 7 de diciembre Vivo corrió contenido los primeros metros, pero se lanzó a partir de los 600 metros y tomó la punta en plena recta final para adjudicarse sin mayores problemas el Trofeo Círculo de las Fuerzas Armadas, dejando a Peter Pan II a 1 ¾ cuerpos en el segundo lugar, agenciando 85”2 para los 1400 metros. Dos semanas después corrió prácticamente contenido hasta terrenos de los 600 metros, donde se lanzó para tomar el primer lugar, sin embargo, en los últimos metros tuvo que emplearse a fondo para contener la atropellada de Tropic King y Renombre, protagonizando un final no apto para cardiacos a favor del hijo de Choir Boy, dejando registro de 114” exactos para los 1800 metros. Cerró el año participando en el Clásico Jockey Club de Venezuela donde no fue enemigo al quedar sexto a 8 cuerpos de Le Notre.

El 4 de enero de 1969 Vivo decepcionó al figurar sexto a 15 cuerpo de Tropic King, pero el 9 de febrero inició entre los últimos, pero progresó enérgicamente a partir de los 400 metros y poco antes de la raya desplazó a Rapid Fire para ganar fácil con ventaja de 2 ½ cuerpos y tiempo de 77”3 para los 1300 metros. Dos semanas después participó en el Clásico de los Sprinters, pero apenas pudo llegar sexto a 11 cuerpos de Breso.

Tras cinco derrotas ante purasangres de la talla de Short Drink, Goabundle, Renombre, Chateaubriand y Rajador, el 10 de mayo Vivo ganó una buena carrera mediante formidable atropellada, terminó superando por 2 cuerpos a Renombre, que también avanzó con mucha fuerza, agenciando 113”4 para los 1800 metros.

Luego de figurar tercero a 3 ½ cuerpo de Rajador, participó en los 2200 metros del Trofeo Cavepro donde quedó noveno a 19 cuerpos de Embusteroso. Luego de tres derrotas donde no deslució del todo, el 31 de agosto Vivo atropelló con mucha fuerza contra Veguero y Breso, sorprendiéndolos sobre la propia llegada en la conquista de una victoria altamente meritoria con ventaja de ¾ cuerpos dejando registro de 105”1 para los 1700 metros.

El 7 de septiembre Vivo participó en el Clásico Internacional de las Américas donde obtuvo un magro octavo lugar a 5 cuerpos del nativo Canelo. Luego de mejorar al figurar tercero a 7 cuerpos de Rajador, el 27 de septiembre hizo gala nuevamente de su efectiva atropellada para alcanzar y superar a Rajador con ½ cuerpo de ventaja y dejando crono de 78” exactos para los 1300 metros. Cerró el año capitalizando siete derrotas, logrando algunas buenas figuraciones.

El 3 de enero de 1970 figuró cuarto a 13 cuerpos de Macabí, pero tres semanas después progresó mucho a partir de los 400 metros y consiguió imponerse en final de fotografía, conteniendo a Futrone que vino en impresionante atropellada, registrando 112”3 para los 1800 metros. Continuó corriendo y figurando en la Serie Especial para importados hasta el 26 de julio cuando saboreó por última vez las mieles del triunfo al derrotar con ½ cuerpo de ventaja a Macabí agenciando 79”2 para los 1300 metros. Luego de superar algunos problemas físicos, Vivo reapareció el 14 de noviembre ocupando el segundo lugar a 6 cuerpos de Estense. Cerró el año figurando tres veces en el dinero.

El 9 de enero de 1971 Vivo figuró tercero a 7 cuerpos de Outsville, pero las siguientes 12 salidas fueron para el olvido, carreras que no mereció participar ya que se le veía agotado y desgastado por el alto hándicap. Finalmente fue retirado de las pistas, acumulando un total de 68 actuaciones en la pista caraqueña, triunfando en 14 ocasiones, además de obtener 8 segundos, 8 terceros, 6 cuartos y 4 quintos, acumulando en metálico la cantidad de Bs. 685.743. Como dato curioso, a pesar de ser montado por diferentes jinetes, los 14 triunfos de Vivo fueron en dupla con Adone Bellardi.

El Sr. Jorge Cruz comentó: "Fui fanático del caballo Vivo, fue el primero que seguí. Siempre he buscado reseñas de él. Me gustó mucho saber de sus primeras carreras, pues no las conocía. La última carrera donde los inscribieron lo retiraron, busqué en aquella época el motivo y apareció que el retiro fue por fisura en un casco. Y la carrera después del Simón Bolívar fue en una carrera válida para el 5 y 6 que creo que fue la primera válida. Recuerdo que en las estampas hípicas de El Universal lo indicaban como primer favorito. Gracias por recordar a mi ídolo".

Vivo fue enviado inicialmente al Haras El Tranquero, luego pasó al Haras Corumbo y finalmente al Haras Las Delicias, donde fue probado como semental sin la suerte esperada, aunque dejó algunos ganadores como Vigna, Waleska y Zurich. Cierro este capítulo de la historia hípica venezolana citando a Andy Dufresne en el film Sueños de Fuga: “La esperanza es algo bueno, quizás lo mejor de todo y las cosas buenas no mueren”.

Fuentes: www.anecdotashipicas.com, Ing. Juan Macedo (apuntes personales), Revista Gaceta Hípica, Sr. Otto León C., Sr. Jorge Cruz.

Anécdotas Hípicas Venezolanas, miércoles 31 de mayo de 2023

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