Anécdotas
Hípicas Venezolanas presenta | |
Oscar
Rivera Gaete | |
Por
Juan Macedo | |
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Oscar
Luis Rivera Gaete
nació en Antofagasta, Chile, el 5 de marzo de 1917. Su papá, Ramón Rivera
(que fue jinete y entrenador),
se negaba a que Oscar fuese jinete e insistía en que se dedicara a los
estudios. |
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Se
inició en Antofagasta, en el Sporting Club,
siendo un niño. Casual fue el primer purasangre que condujo, fue en el año
de 1926. Ese caballo lo entrenaba un hermano suyo, pero lo iba a conducir
otro jockey. Antes de la carrera, su padre discutió con el jockey y le
notificó que no lo correría. Fue así como le dijo a su hermano que buscara
al joven Oscar (que se encontraba
en el hipódromo), tuvieron que prestarle el pantalón, las botas y el
látigo ¡y se echó a correr! Lo
mejor de todo es que ganó la carrera, fue de suerte. El caballo corrió
último y solo se concretó a “agacharse”, la tierra no le dejaba
ver, pero el caballo metro a metro iba “devorando” la pista, pasando la
meta en el primer lugar mientras Oscar continuaba agachado, sin ver. Todos
le aplaudían, le felicitaban porque “había conducido a Casual en forma
magistral” | |
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Fue,
en sus tiempos, jinete en su tierra natal, uno de los más destacados en
Antofagasta. Ganó un buen número de carreras, pero siempre en contra la
voluntad de su padre. Ante esa terquedad de su parte, aprovechando que en
el año 1932 uno de sus hermanos, Juan, se llevaba unos caballos para Perú
se hizo polizonte en el barco hasta llegar a El Callao donde fue
descubierto. Su hermano lo empleó como peón en el Stud que iba a entrenar.
Su padre fue a Lima a buscarlo y finalmente aceptó que fuera jockey,
permitiendo que se quedará allá. | |
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En
Lima no sólo era jockey, también aprendió el oficio del entrenamiento de
purasangres de carrera. Otro de sus hermanos, Antonio, estaba en Caracas
trabajando en la caballeriza de Alfredo Abilahoud y siempre le recalcaba que se viniera,
que ese medio me iba a gustar y en El Paraíso no iba a fracasar.
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Llegó
al Hipódromo Nacional El
Paraíso en el año 1950 como entrenador de purasangres de carrera para
la cuadra del Sr. Luis Ramón Bigott, con la condición de hacerlo como una
prueba, fijando un plazo de 3 meses. Su debut y primera victoria fue con
Paganini el sábado 17 de junio
de ese año, con la monta de Carlos
Cruz, caballo propiedad del Sr. Luis Ramón Bigott. La carrera fue sensacional porque al darse
la partida todas las puertas del aparato se abrieron menos las de Paganini, dando ventaja como de
100 metros, pero en una atropellada como pocas veces sean visto les dio
alcance y los derrotó. Ganó 9 carreras ese año, superando las expectativas
y no le quedó otro recurso que desistir en el
retorno. | |
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Oscar
Rivera
fue la primera persona en traer a Venezuela caballos desde el Perú. En ese
primer lote destacaron Refijo y Aventurero.
Dedicación a tiempo completo para el hipismo, aceptaba las malas racha con
paciencia y esperaba los buenos momentos que siempre llegan. “Nuestra profesión es un sacrificio
permanente” era su frase preferida. | |
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Fueron
varias las ocasiones que Oscar
Rivera volvió a usar el látigo, recordando sus buenos tiempos. El
sábado 14 de febrero de 1953 se efectuó en el Hipódromo Nacional El Paraíso una
carrera especial de disfraces, en la que participaron José Rosendo
Fernández (disfrazado de
chino), Luis Monasterio (disfrazado de Bartolo), Pedro
Camejo (disfrazado de
Sietemachos), Euclides Villalobos (disfrazado de Charro), Juan
Solórzano (disfrazado de
Cosaco), Julio Velezmoro (disfrazado de Zorro) y Oscar
Rivera (disfrazado de Cosaco)
que cruzó la raya en ganancia cabalgando al caballo Marco
Antonio. | |
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El
17 de diciembre de 1960 Oscar
Rivera se lució en la conducción de Potasio, en una carrera especial
a beneficio de la Unión de Entrenadores de Caballos de Carreras de
Venezuela. En efecto, se movió con empeño desde temprano y su cabalgadura
se ubicó bien, quedando a la expectativa durante largo trecho para hacer
muy efectiva su atropellada en los últimos 400 metros. A pesar del tiempo
que tenía sin ejercer la difícil profesión de jinete, se mostró como todo
un estilizado “Gentleman” sobre
el purasangre de carreras |
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En
la opinión de Oscar Rivera, el
mejor caballo que entrenó fue Gaucho Quinto, del Sr. Ángel Fernández Rubio. El
primer y único clásico que ganó fue el Ciudad de Caracas de 1956 con Reina Si, coronada luego como Campeona Criolla dosañera, con la monta de Balsamino Moreira. Ya en La
Rinconada logró adjudicarse la Copa Carlos Márquez Mármol con la
modesta Blue Moon, conducida
por Juan Vicente Tovar. Otros
buenos corredores que pasaron por su cuadra fueron Ardelión, Taguapire, el
inolvidable tordillo Cuyuni Jr. y el segundón
Cleveland. Se retiró de la profesión en el año 1988. Logró en total la
cantidad de 168 triunfos. | |
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También
fue propietario de purasangres con su Stud Doble Cruz, colores que
lucieron los ya mencionados Blue
Moon y Cleveland. Probó
suerte en la cría con el Haras
Doble Cruz, donde alojó al recordado corredor peruano Landlord, establecimiento de cría con poca producción
y algunos ganadores como Queen
Sandra y Eclipse’s Gift. | |
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Cuando
se le preguntaba sobre que época fue mejor, solía responder “No sabría cómo comenzar. Yo diría que
El Paraíso fue siempre más hípico, más acogedor. Todo ha cambiado y
mucho”. Buen preparador, con mucha clase y humildad entregado a la
hípica, hecho a la vieja usanza, siempre contó con pocos efectivos. | |
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Fuentes:
Libro “El Paraíso y su hipismo” del Sr. José Rafael Ball, Revista Gaceta Hípica, Sr. Jaime A.
Casas. | |
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Anécdotas
Hípicas Venezolanas,
miércoles
31 de enero de 2024 | |
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