Anécdotas Hípicas Venezolanas presenta

Príncipe Miguel

(Ven, 2012, Inducement en Ocala Derby por Velcro Fly)

Por Juan M. Arredondo Q.

Para que un purasangre obtenga un título campeonil deben conjugarse varios factores de diferentes tipos, algunos de ellos incluso están fuera del control del equino y sus allegados. Por ejemplo, quien no recuerda en Venezuela casos como Vuelve Jorge o Con Zeus, grandes ejemplares que se vieron impedidos de alcanzarlo como tresañeros por coincidir con otros que en su momento resultaron superiores como My Own Business y High Security respectivamente. Además, es evidente que se requiere calidad y que la salud le acompañe durante una temporada o al menos buena parte de ella para conquistar ese logro, mientras que siempre existirán otros equinos que no han contado con la fortuna de que “se hayan alineado los planetas” en su favor y pasan por la pista cosechando importantes triunfos sin poder coronarse ningún año como campeones. En lo particular considero que un claro ejemplo de ello lo constituye Príncipe Miguel.

De pelaje castaño nació el 4 de abril de 2012 en el histórico Haras Los Aguacates, siendo hijo de Inducement en Ocala Derby por Velcro Fly. Perteneció a la quinta producción del linajudo Inducement (2001, Danzig en Weekend in Seattle por Seattle Slew), animal que como corredor sólo pudo ganar dos en diez salidas y produjo poco más de 65 mil dólares pero que además de su prestigioso padre sus dos abuelos eran Northern Dancer y Seattle Slew, lo cual ya le daba una esperanza de funcionar mejor en la cría que como pistero. En Venezuela ya había dado en sus primeras producciones a corredores clásicos como As Balado, Princess Track y The Runner Ángel.

Por el lado materno, fue el segundo producto de la rendidora Ocala Derby (2005, Velcro Fly en Dance Away por Le Voyageur) que como corredora ganó 10 en 16 salidas incluyendo el Clásico Gelinotte más las Copas José Luis Fernández y Front Stage, la cual antes de Príncipe Miguel dio a la ganadora Almiranta (de 12-2). Además, tanto el padre de Ocala Derby como su abuelo fueron notables sementales en nuestro país para el Haras Gran Derby, produciendo excelentes corredores como los recordados Scott Gordon y Gran Abuelo, por citar sólo a uno de los hijos de cada uno de ellos.

Fue adquirido por el Sr. Luis Camargo para defender la chaquetilla de su Stud Los Audaces, quien le encargó su cuido y entrenamiento al rendidor Humberto Correia, profesional que supo atender con mucha paciencia y esmerada atención la salud de un purasangre que tuvo actividad como pistero durante seis temporadas y sólo pudo completar un total de 21 actuaciones. Aunque su peso físico hacia el inicio de campaña rondaba los 430 kg, con el paso del tiempo logró hacerse “más caballo” llegando a estar en la mayoría de sus salidas en el rango entre 440 y 450 kg.

Su estreno fue parcialmente atípico, aunque en parte es algo que se ha vuelto más frecuente en el presente siglo, como lo es el hecho de hacer su primera carrera en una selectiva. Aprovechando quizás la condición de prueba restringida sólo para ejemplares de algunos haras, fue inscrito en el Gran Premio Asocrinca para dosañeros que se disputó el 29 de noviembre de 2014, en el que a pesar de ser debutante se cotizó como tercer favorito, pero lejos de las preferencias que acaparaban los ya corridos y fogueados Blue Black (ganador ocasional del Clásico Antonio José de Sucre) y Power of Hope, contando con la conducción de “El Morocho” Manuel José Meléan.

En una gran demostración de jinete y ejemplar, el potro Príncipe Miguel fue capaz de superar los tropiezos en carrera (que incluyó levantar y quedar último momentáneamente) logrando desarrollar un fuerte envión que le permitió pasar desde el quinto al primero en apenas 200 metros para apoderarse de la competencia con solvencia superando a Power Of Hope por 2 cuerpos y marcando 87”1 para 1400 metros. Más allá de la calidad de sus rivales, lo resaltante de su triunfo fue la manera como se vio a pesar de los inconvenientes, además que no es fácil debutar ganando una selectiva en ese tiro.

Dada la cercanía de la fecha programada para el Clásico Comparación (que podía darle una opción campeonil como potro) con respecto a su debut sus allegados no lo inscribieron allí, dándole el tiempo suficiente para volver a la acción en la siguiente temporada. Regresó a la acción el 11 de enero de 2015 al disputar el Clásico Francisco de Miranda, pero vio caer su invicto al finalizar cuarto a 5 ¼ cuerpos de Manchester (que conservaba su imbatibilidad) que agenció 99”2 para la milla y logró imponerse de punta a punta tomando el liderato de su generación.

Príncipe Miguel fue sometido a un descanso de tres meses, reapareciendo el 19 de abril con la monta de Ronald Ordoñez en G-1 cotizado como el primer favorito en taquilla, pero confrontó algunos tropiezos en carrera y tras pasar a la punta en la recta final no pudo contener la atropellada de Stanley Palace que lo doblegó por solo ¾ de cuerpo en tiro de 1400 metros. A pesar de perder en su anterior fue llevado al lote selectivo participando en la Copa My Own Business donde nuevamente confrontó tropiezos que lo relegan al último lugar en las primeras de cambio finalizando cuarto a 9 ¾ cuerpos del prospecto Danzante, el cual mantuvo su invicto en tres salidas derrotando al campeón dosañero Rey Tesa que reaparecía luego de su resonante triunfo en el Comparación logrado en diciembre, agenciando el ganador 90”4 para 1500 metros.

Sin embargo, es lógico que cuando a un ejemplar se le tiene en alto concepto se le brinden las oportunidades necesarias para que demuestre su verdadero potencial, por lo que luego de sufrir tres derrotas en fila (todas con ciertos atenuantes) fue inscrito el 31 de mayo en el Clásico José Antonio Páez que constituye el primer peldaño de la triple corona nacional ante varios de los mejores potros, contando con la monta de Leonel Reyes Ramos. Lamentablemente Príncipe Miguel comenzó a sufrir por las lesiones que lo obligan no sólo a terminar séptimo (y último) a 32 cuerpos del vencedor Quick Mani (que logró doble coronarse luego), sino que lo llevaron a un reposo que le implicaría perderse el resto de la temporada.

Luego de recuperarse de sus dolencias el ahora cuatroañero Príncipe Miguel reapareció el 22 de mayo de 2016 en lote de G-1 bajo la conducción de Carlos Rojas, logrando un contundente triunfo hasta por 4 ½ cuerpos sobre el favorito Master Cracker dejando extraordinario tiempo de 69” para 1200 metros. En taquilla devolvió un atractivo 7 a 1 y es muy importante destacar que en sus actuaciones previas acostumbraba quedar rezagado y/o entre los últimos en las primeras de cambio, pero esta vez fue de capaz de tomar la punta desde el brinco inicial, viéndose solvente y mostrando una importante evolución en sus medios locomotores. De aquí en adelante esa sería su forma de correr, accionando en punta o muy cerca de ella, logrando magníficos resultados.

Pero si su reaparición fue llamativa (aunque sorpresiva según su dividendo) para muchos su siguiente actuación serviría para ratificar que no había sido casual su triunfo pues subido a G-2 y como gran favorito logró convincente victoria por 3 ½ cuerpos sobre Soundtrack en tiempo de 76”4 para 1300 metros, avizorando al correr un mes después que estando sano iba a contar en las carreras buenas. Tras un breve descanso de dos meses fue inscrito el 27 de agosto en el lote de G-2ó3 con la monta del aprendiz Franklin González (buscándole descargo) manteniendo su seguidilla de triunfos al superar por 6 cuerpos a Warrior dejando crono de 91” para 1500 metros y quedando listo para volver a las selectivas.

El día 18 de septiembre participó en el Clásico Federico Carmona Perera contando con la monta de Rigo Sarmiento y enfrentando a un trío de enemigos nada más pero siendo todos rendidores ejemplares, logrando extender su racha triunfal a cuatro salidas al vencer de punta a punta por 3 ¼ cuerpos sobre Blue Monkey agenciando 82”4 para los 1400 metros, demostrando que no sólo pertenecía al lote sino que era de los mejores ejemplares del patio y ratificando el alto concepto en que siempre le tuvieron sus allegados.

El 9 de octubre realizaría la que fue su primera (y única) incursión en los cuatro codos al disputar la Copa Vittorio Catanese en tiro de 1900 metros contra diez rivales, en el que siendo perjudicado al tocarle el puesto de pista 11 igual se mandó un carrerón al finalizar segundo a 7 cuerpos de un transformado Neymar Jr. (que ese año había galopado por 30 cuerpos el Clásico Fuerza Armada) y logrando superar al resto del lote con relativa comodidad, agenciando el vencedor un tiempo de 119” para la distancia. Luego de esa semana estallaría en La Rinconada un paro general de caballerizos que canceló el resto del calendario selectivo durante 2016, por lo que el hijo de Inducement no volvió a correr en esa temporada.

Regresó a la acción nuevamente luego de un prolongado descanso el día 30 de abril de 2017 en el lote de G-4,5ó6 y lo hizo de manera triunfal superando de punta y punta por 3 cuerpos a Danzante (aquel que lo derrotó en la Copa My Own Business 2015) marcando 89”4 para 1500 metros. El 25 de junio estrenaría la monta del aprendiz Roberth Capriles (quien sería prácticamente su jinete oficial el resto de su campaña, con un par de excepciones) pero el resultado no varió pues logró repetir su triunfo en G-4,5ó6 venciendo de punta a punta por 4 cuerpos sobre Danzante en tiempo de 83” para 1400 metros. El 6 de agosto intervino en el Clásico Guardia Nacional Bolivariana con la monta de Wilbert León, pero cayó desde el segundo lugar a 1 ¼ de Manchester que lo derrotó en gallarda lid en tiempo de 97”2 para la milla, en esa prueba tristemente se lesionaría el valioso Don Lucas siendo sacrificado pocos días después.

Tras un nuevo descanso superior a tres meses volvería a las pruebas públicas el 19 de noviembre regresando a su cabalgadura Roberth Capriles para anexarse por segundo año corrido el Clásico Federico Carmona Perera al superar de punta a punta y hasta por 8 cuerpos a su escolta Black Powder agenciando un “tiempo oficial” de 87” para 1400 metros. Si se analiza el vídeo de la prueba observando el accionar del vencedor es lógico concluir que es casi imposible que el mismo haya rematado en 15” los últimos 200 metros como lo informó el INH. De hecho, en la versión que fue publicada en YouTube por La Racha Hípica (esta es la dirección de enlace) se puede apreciar que el registro cronometrado fue de 84”2, mucho más cercano a la realidad que la versión oficializada.

El 17 de diciembre cerraría su temporada al participar en la Copa El Gran César enfrentando a un lote de seis rivales que en el papel lucían inferiores a él por lo que fue cotizado como favorito unánime, respondiendo de manera convincente a pesar de superar por sólo un cuerpo a Tamunangue que lo escoltó mientras que el tercero llegaría a unos 7 cuerpos, en tiempo de 90”2 para 1500 metros.

Iniciaría su campaña como seisañero el 4 de febrero de 2018 disputando la Copa El Gran Sol en la que obtendría su tercer triunfo corrido superando por 1 ½ cuerpos al campeón 2016 Supremo (ese día reapareciendo) que lo escoltó y luego llegaría My Trainning Mate que se veía en el papel como su principal rival, el tiempo fue de 90”3 para los 1500 metros.

Exactamente un mes después intervino en el Clásico Socopó en el que logró derrotar por 4 cuerpos a Migui y tercero llegaría Junior Fitz, agenciando 98” para la milla y alcanzando por segunda vez en su campaña una racha de cuatro triunfos consecutivos, esta vez todos en pruebas selectivas.

Pero como todo lo que inicia también debe acabar, aparecieron nuevamente sus dolencias que ameritaron enviarle a un nuevo descanso en su dilatada trayectoria, esta vez fue de cinco meses logrando reaparecer el 5 de agosto en el Clásico Guardia Nacional Bolivariana, siendo cotizado como el principal favorito a pesar de su inactividad pero se encontró con otro extraordinario corredor llamado Jorge Zeta (Caballo del Año 2015) reverdeciendo laureles al galopar por más de nueve cuerpos esta prueba, finalizando Príncipe Miguel en el cuarto a 10 cuerpos luego de perder el tercero en la raya, siendo esta su única actuación en el segundo semestre ya que una vez más fue enviado a un reposo por razones de salud.

El valiente Príncipe Miguel una vez subsanadas sus dolencias regresaría para comenzar su campaña como sieteañero reapareciendo (por enésima vez) el 28 de abril de 2019 con la conducción del aprendiz Kelvin Aray en el lote de G-5+, alcanzando la que se convertiría en su última victoria al superar por 4 ¼ a Tito Germany dejando crono de 85”3 para 1400 metros.

El 26 de mayo participó en el Clásico Revista Gaceta Hípica regresando a su cabalgadura Roberth Capriles en plan de gran favorito, pero tras conseguir una partida normal en la que el veloz Crotone brincó raudo a la punta su jinete lo contuvo para correrlo de atrás (como al inicio de su campaña) logrando buen accionar en la recta final pareciendo que concretaría un nuevo triunfo, pero cayó vencido por un sorpresivo Así Es El Maní que logró superarlo al final por 1 ¼ cuerpo en tiempo de 79”1. El 9 de junio intervino en la Copa Polo Grounds pero tras tomar la punta brevemente fue desplazado por Ilustrado que logró crecerse en la delantera hasta la raya, cayendo desde el cuarto lugar a 4 ¼ cuerpos el veterano corredor que con esta aceptable actuación se despidió de las pruebas públicas.

Su campaña se resume en 12 triunfos de 21 salidas (de ellos tres clásicos y dos copas, además del Gran Premio Asocrinca como dosañero) completando con 4 segundos, 4 cuartos y sólo una no figuración en pizarra, acumulando ganancias por el orden de Bs 1.839.750 en premios y dejando un grato recuerdo entre quienes le vimos correr destacando durante varias temporadas, a pesar de sus lesiones que ocasionaron intermitencias en su desarrollo como pistero.

Cabe preguntarse ¿Hasta dónde habría llegado de mantenerse sano durante el transcurso de su campaña? Es algo cuya respuesta sólo queda en nuestra imaginación, pero ciertamente mostró guapeza y calidad como uno de los grandes corredores de tiros intermedios en La Rinconada del presente siglo. Nuestro reconocimiento al gran trabajo de cuadra que liderizó su preparador Humberto Correia, quien fue capaz de extraer lo mejor de su ejemplar en medio de su delicado cuadro de salud.

Fuentes: Ing. Juan Macedo, Prof. Winston Hernández

Anécdotas Hípicas Venezolanas, miércoles 30 de junio de 2021

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