Anécdotas Hípicas Venezolanas presenta

Irlanda

(Ven, 1965, Brown Rambler en Europa por Mighty Ocean)

Por Juan Macedo

 

En el hipismo venezolano se han presentado variados casos de nobles purasangres de carrera que a pasar de irradiar una luz brillante durante una etapa de su campaña y que por las circunstancias se ha ido apagando, sus propietarios se apegan a la posibilidad de que esa luz vuelva a brillar. Un caso a citar es el de la zaina Irlanda, nacida en el Haras Cocotío durante el año 1965 que fue adquirida por la Sra. Josefina Dager para lucir las sedas rojas y azules del Stud Delta Mu.

 

Desde el momento que entró en el Hipódromo La Rinconada, recibida por su entrenador Millard Faris Ziadie, se le tuvo en alto concepto. Pero en sus dos primeras salidas como dosañera había fallado rotundamente. “A la tercera va la vencida” cita el refrán e Irlanda mejoró notablemente el 2 de julio de 1967 con la monta de Ricardo Ferrer para ganar casi de punta a punta en los 800 metros en tiempo de 46"3 con ventaja de 1 ¾ cuerpos sobre Faena. Luego de figurar cuarta en una actuación decorosa, saboreó nuevamente las mieles del triunfo siendo capaz de quitarle el invicto a la líder de la generación La Menor y superarle con ¾ de cuerpo, agenciando 55”1 para los 900 metros. Tres semanas después figuró tercera a 2 cuerpos de Veronelly.

 

El 9 de septiembre se estrenó en las pruebas selectivas con su participación en el kilómetro de la Copa Edgar Ganteaume donde ocupó el tercer lugar a 2 ¼ cuerpos de La Menor. Al mes siguiente fue inscrita en los seis furlones del Clásico Ciudad de Caracas donde no fue enemiga, conformándose con el sexto puesto a 8 cuerpos de La Menor. Regresó al lote común donde mostró algo de mejoría al quedar cuarta a 3 ¼ largos de Cobra.

 

El 12 de noviembre, en marco de la Polla de Criadores, la hija de Brown Rambler corrió en posiciones intermedias, vino mejorando desde los 400 metros y en plena recta final le dio caza a La Menor que intentaba ganar de punta a punta, para cruzar la meta con margen de ½ cuerpo, recorriendo los 1400 metros en 86”3. Cerró el año presentándose en el Clásico Comparación sin pena ni gloria, donde La Menor conquistó un sensacional triunfo ratificando su titulo como campeona dosañera.

 

El 7 de enero de 1968 Irlanda (oficialmente entrenada por Pedro Fernández, ya que Millard Ziadie estaba de vacaciones) con la monta de Adone Bellardi ocupó el quinto lugar a 8 cuerpos de Charlo. A la semana siguiente se dio de la partida en la Copa Celestino Martínez cabalgada por Balsamino Moreira, donde La Menor punteó desde el inicio hasta los últimos 50 metros, cuando Irlanda, después de venir amenazando seriamente desde los 400 metros, pasó a imponerse con ventaja de ½ cuerpo mediante un remate muy efectivo, agenciando 103”2 para la milla.

 

El 20 de enero Irlanda regresó al lote común (de nuevo oficialmente con su entrenador Millard Ziadie) e inició bien colocada desde la partida y tras una breve lucha con Ugalina, pronto se desprendió en la punta con buena ventaja resultando absolutamente superior al resto de sus rivales, razón por la cual en ningún momento tuvo necesidad de emplearse a fondo, traspusiendo la meta con 5 largos de ventaja sobre Hawayana, parando los cronómetros en 103”4 para los 1600 metros.

 

Luego de fracasar con atenuantes, el 3 de febrero Irlanda fue llevada de las bridas por “El RemarkableIgnacio J. Ferrer corriendo nuevamente un poco comprometida durante los primeros metros, pero esta vez tuvo tiempo para atropellar con toda fuerza, con lo cual pasó a ganar con cierta facilidad en los últimos 250 metros de la carrera y terminó con 2 ½ cuerpos de ventaja sobre Glorioso que fungía de líder, dejando marca de 74”4 para los seis furlones. Dos semanas después la hija de Europa se acomodó entre las primeras en los tramos iniciales mientras la veloz Corsaria hacía el gasto de la carrera, promediando los 250 metros finales Irlanda cayó definitivamente contra la puntera, pero tuvo que apelar a todos sus recursos para desplazarla en los últimos 50 metros y vencer por pescuezo, agenciando 87”1 para los 1400 metros.

 

Luego de dos figuraciones decorosas, el 16 de marzo Irlanda ganó completamente fácil conducida por Carlos Pérez, aventajando por 2 cuerpos a May Pat y registro de 102”1 para la milla, quedando lista para su siguiente presentación, el Clásico Hipódromo La Rinconada con la monta de Balsamino Moreira, donde se limitó a seguir desde los 600 metros a la puntera Soriyer, pudo desplazarla en los 100 metros finales para terminar aventajándola por 2 ½ cuerpos agenciando 101”3 para los 1600 metros.

 

A pesar que había sido retirada por neumonía, participó ante los machos en el Clásico José Antonio Páez siendo cabalgada por Luis A. Alvarado, fracasando al quedar décima a 15 cuerpos de Con Brío. Dos semanas después dio cuenta de Cobra con ventaja de un cuerpo, recorriendo la milla de la Copa John Boulton en 100”3.

 

El 9 de mayo nuevamente superó en gran final a Cobra, dominó por apenas cabeza en una bonita carrera, agenciando 113" clavados en los 1800 metros del Clásico Prensa, Radio y Televisión. Una semana después volvió a enfrentar a los machos en la Copa Antonio Cuadrado sin deslucir figurando cuarta a 6 cuerpos de Pimentón.

 

Tras figurar quinta a 3 ¼ cuerpos de Díscomo en el lote máximo para criollos, el 6 de julio Irlanda ganó sin problemas la Copa Pedro A. Salas, superando a Mighty Cele por 7 cuerpos, agenciando 85”2 para los siete furlones. Visto el alto hándicap por la cual tenía que correr en el lote máximo para criollos, el 13 de julio Irlanda incursionó en el lote de importados de la Octava Serie figurando tercera a 13 cuerpos del inglés Winter’s Quota, dando pie a su inscripción en los 1800 metros del Clásico Día de la Marina de Guerra y Mercante con la monta de Omar Pérez donde decorosamente completó la trifecta a 6 cuerpos de Una Leona.

 

En el resto del año 1968 Irlanda corrió 13 veces más sin saborear las mieles del triunfo, destacando buenas figuraciones como el segundo lugar apenas a un cuerpo de Good Time en el Clásico Fuerzas Aéreas y en la Preparatoria del Clásico del Caribe a 3 ¾ cuerpos de Pimentón; el tercer puesto a 8 cuerpos de Canelo en el Clásico Fuerzas Armadas de Cooperación y el cuarto lugar a 10 cuerpos de Canelo en el Clásico Ministerio de Agricultura y Cría. A pesar de ello, los méritos recaudado durante ese año le permitió obtener el título de Campeona criolla tresañera.

 

Con cuatro años Irlanda figuró cuarta a 12 cuerpos de la argentina Syren en el Clásico Alberto Smith, pero daba señales que “iba a la baja”. Pasó a la cuadra de Domingo Noguera Mora buscando regresar a su antiguo condición, cosa que no pasó ya que corrió diez veces sin pena ni gloria.

 

Con cinco años a cuestas y estrenando la cuadra de Raúl Payares, la nieta de Mighty Ocean iba de fracaso en fracaso, sin ser la sombra de lo que fue la magnífica yegua como tresañera. Fueron otras diez actuaciones para el olvido que no debió correr, pero así decidieron sus propietarios.

 

Ya retirada de las pistas, Irlanda concluyó su extensa campaña de 64 actuaciones con un total de 12 triunfos, además de 2 segundos, 8 terceros, 7 cuartos y un quinto, acumulando en metálico la cantidad de Bs. 566.202. Fue retirada a la cría, siendo inicialmente pensionada en el Haras Karen Sissy y luego pasó al Haras La Evelynda, destacando por intermedio de los ganadores Ulster (abuela de Newyork Dancer), Cork, Dear, Limerick y Detroit.

 

Fuentes: www.anecdotashipicas.com, Ing. Juan Macedo (apuntes personales), Revista Gaceta Hípica, Revista La Fusta, Sr. Otto León C.

 

Anécdotas Hípicas Venezolanas, martes 31 de octubre de 2023

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