| Anécdotas Hípicas 
      Venezolanas presenta | |
| Mi 
      visita al Hipódromo de La Limpia en el Año 
1983 | |
| Por 
      Winston Hernández | |
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| Gran India, con la monta de Lenín Macías, fue la última ganadora en el viejo hipódromo de La Limpia. Foto cortesía: asuprozulia.com.ve | |
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| Eran las vacaciones escolares de 1983. Yo tenía 
      en ese entonces 14 años de edad y había pasado a 3er año de bachillerato. 
      Mis padres tenían la sana costumbre de llevarnos de vacaciones, a mi 
      hermano y a mí, a distintas locaciones de Venezuela y ese año le tocó el 
      turno al Estado 
      Zulia. | |
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| En lo personal, no podía estar más feliz porque 
      cuando mis padres me revelaron el destino turístico lo primero que pensé – 
      casi automáticamente -fue que debíamos visitar el viejo Hipódromo de La Limpia. Ese 
      óvalo lo había conocido por televisión dos años antes cuando Veseli (1978, The Group Captain en Alegoría, 
      por Right Proud) se convirtió en el primer triple coronado en la 
      historia del hipismo zuliano 
      a las órdenes del campeón Juan Vicente Tovar León (+) y 
      Venezolana de Televisión 
      transmitió el Clásico Rafael Urdaneta en la 
      voz de “El Auténtico” 
      Héctor Alonzo 
      Rivas. | 
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| También tenía algunas referencias de la 
      actividad en La Limpia gracias a la revista La Fusta donde el periodista 
      Amable Sánchez 
      (+) informaba sobre los resultados de las carreras. 
      Siempre me llamó la atención el alto dividendo que pagaba el “Ganador Proporcional” y no 
      tenía idea de qué era eso. Cuando visité el hipódromo entendí que la 
      fulana apuesta consitia en una jugada a ganador y el dividendo minimo 
      garantizado era el doble del precio colocado por el 
      hipodromo. | |
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| Nuestra visita al óvalo de La Limpia fue 
      el viernes 12 de 
      agosto –justo dos días antes de la Inauguración de los 
      Juegos 
      Panamericanos en Caracas: “Compromiso de todos, compromiso de 
      usted”– y es fácil de recordar porque aún guardo algunos 
      boletos perdedores de esa reunión. No pudimos estudiar las 
      carreras sino hasta llegar al hipódromo porque (después de preguntar 
      en gran cantidad de quioskos por folletos, revistas 
      o suplementos que contuvieran alguna información) fue allí 
      donde finalmente pudimos comprar la Revista Hípica Zuliana. Era 
      curioso ver cómo ejemplares que conocíamos de La Rinconada, aparecían en el 
      retrospecto de esa revista con el rótulo de “Debutante” sin hacer mención 
      alguna de sus actuaciones en el óvalo 
  capitalino. | |
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| Esa tarde paseamos por una zona muy concurrida 
      de la ciudad de Maracaibo y yo caminaba bastante distraído ya que 
      estaba leyendo la Gaceta Hípica 
      analizando las carreras del fin de semana. Por andar en 
      eso no vi una alcantarilla que estaba sin tapa cerca de la 
      Basílica y caí en ella, por lo que me gané de recuerdo una herida de 
      cierta profundidad en la pierna izquierda. En medio de aquel tremendo 
      sol, con el gentío en la calle, y aquel calorón -eran como las cinco 
      de la tarde– hasta me desmayé. Mi padre me curó la herida y nos fuimos al 
      Hotel Gran Delicias 
      donde nos habíamos alojado. Me sentía bastante mal y me 
      dolía la pierna, pero recuperé fuerzas y aunque mis viejos no estaban muy 
      convencidos que fuera al hipódromo en esas condiciones, después de mi 
      terca insistencia finalmente accedieron. Luego de ver el capítulo de 
      Mazinger Z –mi 
      serie favorita de aquella época– mi papá y yo emprendimos el 
      emocionante viaje hacia el hipódromo. Por supuesto que en el camino, 
      ante la expectativa, me fui sintiendo algo 
  mejor. | |
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| Llegamos y aquello –el óvalo de La Limpia- nos pareció de lo 
      más pintoresco. Aún no se había iniciado la jornada de carreras y los 
      vendedores ambulantes que estaban en las zonas adyacentes al hipódromo 
      saciaban el hambre y la sed de los aficionados que comenzaban a llegar al 
      lugar. Recorrimos las instalaciones y las comparaciones con La Rinconada no se hicieron 
      esperar. La tribuna era pequeña y de madera, de forma que cuando 
      alguien se movía aquello parecía un temblor de tierra; la pizarra también 
      diminuta comparada con la moderna del óvalo de Coche y más tarde, después 
      de cada carrera, nos resultó gracioso que un muchacho saliera corriendo 
      para colocar manualmente el orden de llegada con unos 
      números impresos en unos cartones. La pista era pequeña y para una 
      carrera de  | |
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| El jinete del momento era Ramón Eduardo 
      Añez  quien ese año lograría su última 
      estadística por carreras ganadas. Al mismo tiempo,  | |
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| Recuerdo que uno de los ejemplares que más me 
      llamó la atención en mi visita a La Limpia fue el prometedor 
      dosañero Rosicler (1981, East Sea en Diatriba, por 
      Cognac), perteneciente al Stud Tío Ciro y crianza del 
      Haras Palito 
      Blanco. Ese año ganaría los Clásicos Azucría y 
      Comparación (Clausura) 
      –con 
      la yunta Noel Herman-Evelio 
      Molero- y también la Copa Juan 
      Emanuel. | |
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| Después de ver varias carreras, salimos del 
      hipódromo y fuimos a matar el hambre comiendo unos perros calientes. 
      El carrito a donde llegamos tenía un pequeño televisor y 
      estaban pasando la telenovela “Nacho” con Guillermo Dávila y la juvenil 
      Alba Roversi. 
      Esta historia, transmitida por Venevisión, era la continuación 
      de la exitosa “Ligia Elena” 
      de César Miguel 
      Rondón. Satisfecha el hambre, regresamos al óvalo para ver 
      una carrera más y luego nos venció el cansancio por lo que nos fuimos al 
      hotel y seguimos las incidencias de las dos últimas competencias por 
      radio (¡qué tiempos aquellos!). 
      Habíamos sellado un “Pool de a 
      locha” e íbamos pegados hasta la cuarta válida, pero nos 
      caímos en las dos últimas que fueron justamente las carreras que no 
      ligamos en el hipódromo. | |
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| 1983 fue un gran año en La Limpia para ejemplares como 
      el ex caraqueño Fred  (1979, Condotti en Kent’s Countess, por 
      Proud Word), nacido y criado en el Haras San Francisco y propiedad 
      del Doctor Eduardo Larrazábal 
      (+) con su Stud 
      Campoancho. Obtuvo la victoria en el Clásico Nuestra Señora de la Chiquinquirá 
      con la dupla  Rubén Almarza- | |
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| El Clásico Rafael Urdaneta de esa 
      temporada fue ganado por Grand 
      Champs (1980, Gran 
      Tiro en Champs Elisse, por Chateaubriand), nacido y criado en el 
      Haras Santa 
      Lucía, con la conducción de Juan Vicente Tovar y el 
      entrenamiento de “Beto” 
      Gilberto Henríquez 
      en  | |
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| Otro que destacó fue Mister William (1980, The Group Captain en Dakota, por 
      Gradisco) que se impuso en el Clásico Ciudad de Maracaibo en 
      tiro de milla con la dupla Ángel Godoy- | |
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| Culmino estas humildes 
      remembranzas confesándoles que la cicatriz que llevo en mi 
      pierna izquierda siempre me hace recordar con cariño uno de los 
      mejores momentos que viví en mi adolescencia hípica: “Mi visita al Hipódromo de La Limpia en el año 
      1983″. | |
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| Anécdotas Hípicas 
      Venezolanas, 
      jueves 26 de mayo de 2011 | |
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